martes, 23 de septiembre de 2008
Amizade
Unha boa amiga faloume este verán dunha novela: "Cometas en el cielo" de Khaled Hosseini, e animeime a leela. Foi unha boa sorpresa e pasei uns días de lectura casi compulsiva nos que nadei por un montón de emocións que me fixeron sentir moi humana. O libro está redactado en primeira persoa e transcurre en Afganistán. Impresionoume moito a humanidade que desprende toda a historia, por eso quero compartilo con vos.
A primeira pax. do libro dice así:
"Diciembre de 2001, Me convertí en lo que hoy soy a los doce años. Era un frío y encapotado día de invierno de 1975. Recuerdo el momento exacto: estaba agazapado detrás de una pared de adobe desmoronada, observando a hurtadillas el callejón próximo al riachuelo helado. De eso hace muchos años, pero con el tiempo he descubierto que lo que dicen del pasado, que es posible enterrarlo, no es cierto. porque el pasado se abre paso a zarpazos. Ahora que lo recuerdo, me doy cuenta de que llevo los últimos veintiséis años observando a hurtadillas ese callejón desierto. Mi amigo Rahim Kan me llamó desde Pakistán un día del verano pasado para pedirme que fuera a verlo. De pie en la cocina, con el auricular pegado al oído, yo sabía que no era sólo Rahim Kan quien estaba al otro lado de la línea. Era mi pasado de pecados no expiados. En cuanto colgué, salí a dar un paseo por Spreckels Lake, en la zona norte de Golden Gate Park. El sol de primera hora de la tarde centelleaba en el agua, donde docenas de barcos diminutos navegaban empujados por una brisa vivificante. Levanté la vista y vi un par de cometas rojas con largas colas azules que se elevaban hacia el cielo. Bailaban por encima de los árboles del extremo oeste del parque, por encima de los molinos de viento. Flotaban la una junto a la otra, como un par de ojos que observaran San Francisco, la ciudad que ahora denomino "hogar". De repente, la voz de Hassan me susurró al oído: "Por ti lo haría mil veces más". Hassan, el volador de cometas de labio leporino. Me senté junto a un sauce en un banco del parque y pensé en lo que me había dicho Rahim Kan justo antes de colgar, como si se tratara de una ocurrencia de última hora. "Hay una forma de volver a ser bueno". Alcé de nuevo la vista en dirección a las cometas gemelas. Pensé en Hassan. Pensé en Baba. En Alí. En Kabul. En la vida que había vivido hasta que llegó el invierno de 1975 y lo cambió todo. Y me convirtió en lo que hoy soy."
O libro reflexa a grandeza do sentimento de amizade: a lealtade, a integridade, a fidelidade...en estado puro. Fíxome pensar que vivimos só unha porcentaxe baixa da nosa humanidade. Que temos un potencial humano grandioso que as veces case non chegamos a imaxinar. Aprendín un pouquiño do que a honestidade pode regalarnos, do intenso e máxico de vivir as relacións dende o máis puro e auténtico de nos mesm@s. Vivir a amizade con maiúsculas, con sinceridade, honestidade, lealtade e integridade. Quero vivir estas palabras, e compartilas con vos.
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6 comentarios:
Bueno que te voy a contar, que si me dieran comisión por cada vez que recomiendo este libro, estaría forrandome!!!
Desde luego, si solo usamos una pequeña parte de nuestro cerebro, sin duda usamos aun una parte mas pequeña de nuestra humanidad.
tan bella y nutritiva la integridad, la humildad y la capacidad de perdonar, y de perdonarnos que impregna cada pagina de este libro. tan bella, tan necesaria y desgraciadamente tan escasa..
Querote fermosa, y botote de menos
Chio
(Pensamentos resacóticos)
As cometas, o mesmo cás bolboretas,
voan.
Ás cometas, o mesmo que ás bolboretas,
gústalles bailar.
As cometas, o mesmo cás bolboretas,
son lindas.
Ás cometas, o mesmo que ás bolboretas,
gústalles xogar.
As cometas, o mesmo cás bolboretas,
son de fermosos cores.
Ás cometas, o mesmo que ás bolboretas,
gústalles o ar.
Mais…
As bolboretas, ó contrario cás cometas,
gozan da liberdade.
E ós homes, o mesmo que ás cometas,
gústalles soñar.
Soñar ser bolboreta…
Soñar soños de cometa…
Bicos Gelu...
Moitas grazas por escribir non meu blog esos pensamentos resacóticos tan bonitos.
Moitos bicos amigo.
Geluka, como siempre disfruto mucho con la lectura de tu blog. expones de una forma bella los problemas humanos de la gente de hoy, y en este caso, los problemas de nuestra sociedad.
un pensamiento recurrente que tengo desde hace tiempo reflexiona sobre los valores de nuestra sociedad avanzada. ¿cuál es el objetivo de los que vivimos en esta sociedad? a veces me parece que lo que nos venden los periódicos, televisiones, radios ... ,y la sociedad en general, consiste en que el desarrollo personal es directamente proporcional a los caballos de potencia de nuestros coches. cuanto mayor sea tu cartera y más poder tengas, más te acercarás a haber tenido éxito en la vida. pero realmente, ¿es eso el éxito? no creo que las personas que tengan más dinero y poder sean realmente félices. es cierto que una cierta posición socio-económica nos evita preocupaciones. pero, entonces ¿dónde está la clave? ¿cómo desarrollarnos como personas? ¿es la felicidad una meta o un camino? quizás la clave esté en la humanidad de la que hablas; en tu interior y en tu humanidad, y la de aquellos/as que te rodean.
sí, es posible que todos debieramos reflexionar sobre nuestra humanidad. potenciarla y liberarnos de cargas innecesarias. sería nuestro mejor regalo.
moitos bicos
Hola bacterio,
bo día!, pois eu creo que si,pode que o obxetivo sexa ser humanos que é o que somos:explorar, aprender e desenvolver o potencial que temos como seres humanos. Coñercernos a nos mesm@s e coñecer aos demais.
Moitos bicos bacterio, gracias por estar ahí..
Cómo é aquilo: coñece o teu sentido no corazón dos que che rodean.
E como diría Rubén Darío:
Dichoso el árbol que es apenas sensitivo,
y más la piedra dura, porque esa ya no siente,
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo,
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.
Ser, y no saber nada, y ser sin rumbo cierto,
y el temor de haber sido y un futuro terror…
Y el espanto seguro de estar mañana muerto,
y sufrir por la vida y por la sombra y por
lo que no conocemos y apenas sospechamos,
y la carne que tienta con sus frescos racimos
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos,
¡y no saber adónde vamos,
ni de dónde venimos…!
Bicazos Gelu...
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